Juan Carlos
María Isidro nació en Aranjuez el 15 de mayo de 1822 y realizó el mismo periplo
juvenil que su hermano mayor Carlos IV. No solo fue pretendiente de la causa
perdida española sino que también se le conoce como Juan III de Francia y de
Navarra al ser pretendiente legitimista al trono de Francia.
El 6 de
febrero de 1847 se casó con la Archiduquesa María Beatriz de Austria-Este con
la que tuvo dos hijos -Carlos María, Duque de Madrid, y Alfonso, Duque de San
Jaime- y que demostró ser una mujer de muchísimo carácter, amén de tradicionalista católica. Llevarán
una vida tranquila en Módena hasta la revolución de 1848 que les empujó a
Austria y luego a Londres.
En ese
periplo contrajo el virus liberal (del que permanecieron inmunes los demás miembros
de la Casa Real carlista) y como medida de profilaxis se separaron
discretamente. Además fue lingüista, deportista... un incansable viajero conocido en su tiempo por su amplia cultura.
Y llegamos
al 23 de abril de 1860 cuando sus dos hermanos la pifian en San Carlos de la
Rápita y él se encuentra poseedor de los derechos de la dinastía carlista. ¿¡El
pretendiente carlista es un liberal!? Bueno, al menos uno de los DOS pretendientes
carlitas de ese momento porque Carlos VI, una vez lejos de la bayonetas
isabelinas, se retractó de su renuncia. Si leen este blog sabrán cómo se
solucionó el entuerto: Carlos y su hermano abdicador murieron de tifus. Así
tenemos a Juan III, conde de Montizón.
No fue muy
querido por los carlistas- ¡leches, era liberal!- y quién realmente dirigió la
facción fue Teresa de Braganza, princesa de Beira. En 1860
declaró abiertamente sus deseos de ser reconocido como rey de España, aceptando el régimen constitucional. La princesa de Beira y otros destacados jefes carlistas le solicitaron que aceptara los principios tradicionales o que abdicara en su hijo
mayor. Don Juan se negó a ello, reconociendo públicamente a Isabel II
tres años más tarde.
Con ello,
Teresa de Braganza proclamó en su "carta
a los españoles" , en 1864, como rey legítimo a Carlos, el hijo de
Juan III. Podríamos decir que fue un golpe palaciego en una Casa real de
opereta y sin reino. Hicieron aquello por lo que habían causado una sangrante
herida en España.
De su parte
quedaron carlistas como Ramón Cabrera o el conde de Chambord que le seguirán
reconociendo como rey hasta que Juan III abdique en su hijo Carlos, Carlos VII,
el 3 de octubre de 1868.
¿Y después?
Se retiró a Hove, en Brighton. Pero participó en la Tercera Guerra Carlista
como General Ingeniero de los ejércitos del pretendiente y, a la muerte de
Chambord (24/08/1883) una parte de sus seguidores le proclaman heredero al
trono de Francia.
Falleció en
Brighton (Inglaterra, Reino Unido de la Gran Bretaña) el 21 de noviembre de 1887
y enterrado en la Catedral de Triestre.
María
Beatriz de Austria-Este (1824-1906)
Archiduquesa
de Austria, hija de Francisco IV, duque soberano de Módena, Reggio y Mirandola,
contrajo matrimonio en 1847 con el infante don Juan de Barbón. Su catolicismo
tradicional y sus opiniones contrarrevolucionarias chocaron, y fuertemente, con
la nueva ideología de su marido. Solución: separación en 1850. Ella volvió a Módena y su vida se centrará en
la educación de sus hijos y en actividades benéficas.
Cuando sus
hijos se hicieron adultos se retiró al convento de monjas carmelitas de Graz
(Austria) con el nombre de Hermana María Ignacia del Sagrado Corazón donde
murió a la edad de 82 años y donde están enterrados sus restos mortales.
Fue una escritora
incansable de literatura religiosa.
Bibliografía:
Antonio
Manuel Moral Roncal. Profesor de la
Universidad de
Alcalá de Henares
No hay comentarios:
Publicar un comentario