viernes, 7 de marzo de 2014

LAS MOTIVACIONES DE LA GUERRA

Muchas veces cuando empezamos a hablar sobre las guerras se les buscan siempre unos condicionantes políticos y se trata de usar el sentimiento identitario como estandarte para justificar combatir contra otros que tienen otro mismo sentido identitario.

En el libro hablamos de varias guerras distintas, comenzando en una época en la que los romanos han llegado a la Península, concretamente cuando comienzan a combatir contra los cántabros. Esto sucede entre el 29 y 19 A.C. Antes de esto, probablemente alrededor del año 75 A.C, con Pompeyo, Quinto Sertorio y algunos otros militares hubo otra guerra interna entre romanos dentro de Hispania, y es probable que en esta época el territorio autrigón se uniese al Imperio... lo que provocó enormes tensiones con sus vecinos, los cántabros con los que hasta ese momento habían comerciado. Según los historiadores romanos, los autrigones estaban especializados en la producción agrícola y por contra los cántabros lo eran más de la ganadería. El intercambio de bienes alimentarios era algo básico antes de la llegada de los romanos para ambos pueblos. La llegada del Imperio cambio ese equilibrio y se llegó a uno de los motivos del conflicto. (La llegada de los visigodos, alanos, suevos, vándalos en parte estuvo también condicionada por problemas de suministro alimentario), también son frecuentes las revueltas cuando el ser humano no tiene con que comer.

( EL HAMBRE )

Sin embargo no todos los conflictos se pueden entender solamente desde el tema nutricional, el ser humano tiende a ambicionar, a enriquecerse y a crecer en poder. En esa escalada de poder, de concentración de riqueza podemos encontrar de nuevo a los romanos que buscaban esclavos y oro para poder mantener su magna estructura militar y política / administrativa... de hecho el momento en el que el Imperio comienza a caer tiene menos que ver con la llegada de pueblos que intentasen atacarles, que con el hecho de que en el propio Imperio, no llegan los suficientes recursos para pagarlo todo... la teoría del materialismo histórico explica gran parte de los hechos históricos... pero no solo los romanos combatieron por la riqueza... las guerras carlistas por poner otro ejemplo, eran otro de los ejemplos ya que los dos bandos se correspondían a dos ideas económicas distintas, la nobleza a favor del mantenimiento del Antiguo Regimen, frente a los burgueses que deseaban no ser ellos los únicos que contribuyesen al mantenimiento del Estado... si nos vamos para atrás, en las luchas señoriales ocurría lo mismo, eran motivaciones económicas las que enfrentaron a los Salazar y a los Velasco... por lo que el DINERO, era otro de los motivos de lucha.

( EL DINERO / LA RIQUEZA / LA AMBICIÓN )

También aunque es probable que el poder tenga más importancia que el propio hecho de fe, la religión ha sido y sigue siendo motivo de conflicto. La llegada musulmana a la Península tuvo un componente religioso de expansión de una religión muy novedosa (menos de 100 años desde la Hegira), y posteriormente las Cruzadas para recuperar la Tierra Santa en la actual situación de Israel donde sigue habiendo conflictos de forma permanente. En el siglo XVI, el cisma luterano, fue también otro motivo de conflictos, aunque detrás de la fe de muchos se escondía también un firme interés económico. El ser humano es bastante práctico y cree en aquello que más le conviene. Cuando vinieron los musulmanes muchos cristianos se convirtieron para pagar menos impuestos y cuando se produjo el flujo opuesto, se volvieron a reconvertir sus descendientes.

( LA RELIGIÓN)

Alguno puede hablarme de que el odio puede ser también un motivo de guerras, pero creo que el odio normalmente se da cuando se usa alguna de las tres motivaciones previas en contra de un grupo. Pero claro, eso es solo mi opinión.


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